Concejales de la localidad bonaerense de Bragado aprobaron ayer un proyecto de Comunicación en el que manifiestan su “desagrado” al Poder Ejecutivo nacional por el aumento de derechos de exportación a los subproductos de soja establecido por decreto en marzo pasado.
Subrayan que la medida es “de nulidad absoluta por cuanto no se hallan delegadas por el Congreso Nacional las facultades prescriptas en la Constitución”. Y solicitan al Congreso, quien debe fijar impuestos según la norma, que “propicie la disminución de las alícuotas hasta su eliminación” Para los concejales bragadenses, las retenciones “resultan ser una sumatoria de las orientadas en perjuicio del sector productivo que más divisas ingresa al país”, que afectan especialmente a ese partido, en el cual gran parte del territorio está dedicado a la actividad agropecuaria.
El proyecto fue presentado por el bloque de Juntos por el Cambio y aprobado ayer por el voto positivo de sus diez integrantes contra los siete negativos del Frente de Todos, en una sesión que contó con la presencia de productores en el recinto.
“No solo es una medida nula e inconstitucional ya que se saltearon las facultades naturales que tiene el Congreso de la Nación, sino que, además, carga de más presión impositiva al sector agropecuario que para nuestro partido y nuestra provincia es fundamental,”, dijo el concejal de JxC Nicolás Araujo.
“Se está expoliando al productor, en soja, la presión impositiva está llegando al 68% de la renta agrícola esta campaña”, remarcó el edil.
Además, señaló que la recaudación por retenciones “queda totalmente en manos del gobierno nacional porque no son coparticipables, se cobran en la Aduana, con el bruto, y el productor puede incluso llegar a perder pero se las cobran igual”, indicó. Por eso, lamentó que se agudice la concentración de la tierra y de la producción: “Entre 2002 y 2017 se perdieron 80.000 productores”, remarcó Araujo.
Araujo aclaró: “No pedimos que no se cobren impuestos, pedimos se rediscuta para que sean justos, que se bajen los tributos al campo, sabemos que es un recupero automático porque eso se termina recuperando en el impuesto a las ganancias”, explicó.